publicidad

* Mozaga,... esfuerzo del campesino



El sudor

En el mar halla el agua su paraíso ansiado
y el sudor su horizonte, su fragor, su plumaje.
El sudor es un árbol desbordante y salado,
un voraz oleaje.
Llega desde la edad del mundo más remota
a ofrecer a la tierra su copa sacudida,
a sustentar la sed y la sal gota a gota,
a iluminar la vida.
Hijo del movimiento, primo del sol, hermano
de la lágrima, deja rodando por las eras,
del abril al octubre, del invierno al verano,
áureas enredaderas.
Cuando los campesinos van por la madrugada
a favor de la esteva removiendo el reposo,
se visten una blusa silenciosa y dorada
de sudor silencioso.
Vestidura de oro de los trabajadores,
adorno de las manos como de las pupilas.
Por la atmósfera esparce sus fecundos olores
una lluvia de axilas.
El sabor de la tierra se enriquece y madura:
caen los copos del llanto laborioso y oliente,
maná de los varones y de la agricultura,
bebida de mi frente.
Los que no habéis sudado jamás, los que andáis yertos
en el ocio sin brazos, sin música, sin poros,
no usaréis la corona de los poros abiertos
ni el poder de los toros.
Viviréis maloliendo, moriréis apagados:
la encendida hermosura reside en los talones
de los cuerpos que mueven sus miembros trabajados
como constelaciones.
Entregad al trabajo, compañeros, las frentes:
que el sudor, con su espada de sabrosos cristales,
con sus lentos diluvios, os hará transparentes,
venturosos, iguales.


@Miguel Hernandez


El Monumento al Campesino están ubicados en el centro de la isla, en el pueblo de Mozaga. Homenje al esfuerzo de la comunidad campesina de la isla, quienes con ingenio y arduo trabajo labran esta árida tierra. El monumento es también llamado Monumento a la Fecundidad, fue construido por César Manrique y tiene una altura de 15 mts.

Manrique utilizó tanques de agua de antiguos barcos pesqueros para la construcción de esta obra, destaca su imponente tamaño, color blanco y líneas redondeadas, esta levantado sobre una base de roca.


La Casa museo y el Monumento al Campesino fueron construidos para inmortalizar el duro trabajo de la comunidad campesina lanzaroteña, cuyos esfuerzos se materializan en La Geria, paisaje único en el mundo, y en la obtención de productos agrícolas de una tierra árida.

La Casa museo fue un antiguo caserío restaurado y ampliado por el artista, quien desde los años sesenta estuvo involucrado en una campaña por rescatar y preservar el estilo arquitectónico canario.




Contiene una extraordinaria colección de útiles e instrumentos utilizados por los campesinos a través de los tiempos que permiten al visitante recuperar gran parte de la historia de la isla y de sus tradiciones.
   
Esta obra monumental lanza destellos blancos bajo el cielo azul.

Junto al monumento este casa señorial construída en el estilo típico de la época en la isla, tiene un bonito patio que acoge hoy día al museo de los labradores.



En este lugar ha sido construído un enorme pabellón con tejado en forma de cúpula y pasadizos bajo tierra en las rocas de lava, que ofrece mucho espacio para celebraciones, eventos de todo tipo y conciertos.

También resultan interesantes los talleres de artesanía que alberga el museo (de cerámica, de bordados y tejeduría), así como la cocina antigua repleta de objetos domésticos de la antigua vida de Lanzarote.

El restaurante del Monumento ofrece una deliciosa muestra representativa de la cocina lanzaroteña: pescado fresco, papas de la tierra, sancocho, y dulces típicos, en un marco que nos hará viajar hacia atrás en el tiempo.


No hay comentarios: